Bali : Grata sorpresa

*** Antes que nada, comentar que ya estamos de vuelta por nuestra isla, Gran Canaria, algo antes de lo pensado, pero con las mejores sensaciones del mundo. Me voy a permitir hablar ahora en primera persona, haber disfrutado como lo he hecho junto a la persona que más quiero, pasando momentos de todos los colores en estos tres meses intensos es, sin duda, algo que nunca se me borrará. Creo que no existe mejor compañer@ de viaje que ella... ha sido demasiado todo lo vivido, por lo que hemos pasado y... créanme es realmente difícil de explicarlo... sólo se que estamos dispuestos a repetirlo en algún momento... la disposición y las ganas nunca se pierden y son los mejores aliados para esto. Gracias por todo, de verdad... TE QUIERO MUCHO!! ***

Desde Lombok saltamos a su hermana Bali, la cuál nos cautivó bastante. No sabemos si porque nos la esperábamos mucho peor por todo lo que nos habían contado, pero nos regaló una semana llena de aventuras, grandes sensaciones y belleza por todos lados. No encontramos esa gran masificación, ni tampoco la vimos para nada sucia, todo lo contrario... quizás por la época en la que fuimos o porque visitamos los lugares correctos. Obviamente nada tiene que ver con la tranquilidad y paz que reina en Lombok, pero como ya había dicho, eso es un marco incomparable.

Nuestra primera parada fue en Ubud, una pequeña ciudad, súper bonita, rodeada de templos hindúes y de montañas con grandes arrozales. Sus calles son agradables para pasear, tomar algo e ir adentrándote en cada rincón, visitando lugares realmente únicos... tiene ese encanto balinés e hinduísta que no encuentras en la musulmana Lombok, y es que la religión, definitivamente, tiene
mucho que ver en sus estilos de vida.

Aquí nos pegamos un día por el norte de Bali, salimos bien temprano y estuvimos recorriendo durante todo el día con la moto por cascadas, arrozales, volcanes y lagos. Nos llovió mucho... considero que nos hicimos ( porque Margot también se atrevió a hacer algunos kilómetros ) un máster en conducción sobre mojado con una scooter casi sin frenos y con más kilómetros que un taxi, y es que aquí las "Honda Vario" superan el millón de kms. y eso que se les da bastante caña.

Tras unos días recorriendo el norte y Ubud, pusimos rumbo a la península de Bukit, donde se encuentran las míticas Uluwatu, Padang y Bingin, aunque también tiene muy buenos points más al sur. Como de costumbre, y huyendo un poco de la muchedumbre, nos quedamos en medio de la nada a unos 15 minutos en moto de las playas y fuimos a las zonas menos transitadas del sur como Nyang Nyang, una increíble derecha e izquierda que rompe sobre afilado reef, en una playa preciosa, tranquila y súper limpia. También pasamos por Greenball y la izquierda de Pandawa, que son dos playas tranquilísimas y con muy buen surfing. La mayoría de las playas en esta península se encuentran al abrigo de acantilados, por lo que hay que hacer un pequeño esfuerzo para llegar a ellas, y sobretodo para volver subiendo lo andado.

Obviamente visitamos la mítica Uluwatu, y aunque no llegué a surfearla porque no era la época y casi no había olas, disfrutamos muchísimo de sus charcos y su gran puesta de sol al estar orientada totalmente al oeste. Aquí nos tomamos nuestra primera Bintang en una terracita con vistas espectaculares a la puesta de sol, charlando del mundo y la vida con dos chicas españolas.

En Bali vivimos algo único en el mundo, es el "Nyepi Day" (día del silencio) y viene siendo el día sagrado del año. Para resumirles, es un día en el que está prohibido salir del alojamiento, nadie trabaja, no se pueden encender las luces, no se puede casi hablar e incluso se permiten el lujo de ser el único país en el mundo que cierra su aeropuerto un día al año... este día lo toman muy en serio. Bali se convierte en absoluto silencio, calles vacías y todo el mundo rezando en sus casas para quitar todos los males del año y comenzar su año nuevo limpio de cualquier movida... cosas de estos lares, sólo queda respetar sus costumbres y pasar el día jugando a las cartas y la noches a la luz de las velas. Nosotros fuimos a la ceremonia que se celebra el día anterior, hacen figuras enormes y las muestran al pueblo con música y bailes típicos de cada zona.

Con esto pusimos rumbo a Australia, un país único al que nos gustaría volver en algún momento. Ya pondremos un post sobre nuestra experiencia Aussie.

Les dejamos con las fotos y vídeos de Bali

Un saludo viajeros!!

Islas Gili

Un remanso de auténtica paz. Esa es la breve descripción de estas islitas situadas a unos 20 minutos de bote desde el norte de Lombok. Para llegar a ellas tienes varias opciones, como lanchas rápidas, tours privados para turistas, o la que nosotros pillamos, recomendados por un amigo local que nos hicimos en Kuta Lombok, en el bote local, con la gente local que se mueve entre islas, y que sale unas 10 veces más económico que las lanchas que operan para turistas. Eso si, no existe horario para este bote, y sólo zarpa cuando se complete el cupo máximo, que éramos unos 30 pasajeros.

Y cuando hablamos de paz, es de la verdadera paz..., de la paz graciosera que tenemos en Canarias y que tanto nos gusta. Las gili son un archipiélago de tres islitas: Trawangan ( para los más fiesteros ), Meno ( para los que van de luna de miel y nada más ) y la tercera “Gili Air” que es dónde fuimos nosotros, que viene siendo la mezcla entre las dos anteriores...con algo de fiestilla y sitios para tomar, aunque con mucha paz a su alrededor.

 

Son simples los motivos por lo que tanto nos gustó Gili Air: Es bastante pequeñita y en unos 50 minutos caminando le has dado la vuelta a la isla, bordeando toda su costa; Aquí si que tienen bastante más en cuenta la relación con el medio ambiente y se nota en sus calles, playas y construcciones, muchas de ellas con bambú, cañas, piedras... todo bastante “eco”; Sus playas están resguardadas por un fondo coralino y en el sureste de la isla se encuentra la mejor zona para hacer snorkel en la que he estado, rodeado de corales, peces de colores y tortugas (diferentes a las de Sri Lanka); Aunque la pura paz llega cuando te dicen que no existe vehículo a motor y que la única forma de moverse es caminando o en bicicleta ( hay opciones de moverse en caballo, pero ni lo nombro porque me parece ridículo, además tienen bastante explotado a los caballos, no entiendo como algunos turistas usan este medio ). Este punto fue un descanso de tanta moto tras más de dos semanas en Lombok.

Aquí nos quedamos en un hostel (Begadang Backpackers) con muy buena onda, súper barato (aunque en Gili todo es ligeramente más caro que en Lombok) en una cabañita de bambú y cañas e incluso con piscina para los ratitos más tranquilos. Pasamos cuatro días con la mayor tranquilidad del mundo en un auténtico remanso de paz y haciendo algunas amistades que esperamos encontrar por Australia.

De vuelta a Lombok, volvimos a nuestro lugar favorito, Kuta Lombok, donde ya nos desenvolvemos como en casa. Sabemos en que warung nos preparan el mejor Nasi Campur, Mee goreng... y al mejor precio. Sabemos donde ir a comprar la mejor fruta y sobretodo sabemos movernos con total soltura por sus hermosas bahías y su gran surfing.

Retrasamos el vuelo a Bali ya que llegaba un potente swell con grandes olas y no tenía como perdérmelo, y es que surfear con poca gente y muy buenas olas todavía es posible aquí.

Con esto nos despedimos de la increíble Lombok y nos vamos a la isla vecina de Bali.

Un saludo viajeros.

Indonesia: Lombok

Al fin llegamos a Indonesia, más concretamente a Lombok, aunque no antes sin hacer una "escala" de las nuestras (esta fue de 3 días) por Kuala Lumpur, en Malaysia. Lo que era una escala obligatoria, ya que los vuelos hacia Indonesia siempre suelen hacer escala allí, lo convertimos en visitar una ciudad con mucho carácter, que la bautizamos como la pequeña Dubai, pero sólo porque parece que Dubai fue creada en base a Kuala Lumpur, aunque a lo bestia.

Kuala Lumpur es una ciudad pequeña y todos sus atractivos se pueden hacer caminando si te alojas en "China Town" que fue donde nosotros nos quedamos. El problema de caminar es que se puede tornar muy agotador y pesado por el excesivo calor mezclado con una humedad impresionante, que dabas dos pasos y ya estabas empapado en sudor. Parece que aquí lo tienen todo pensado, y el gobierno ha puesto cinco lineas gratuitas de guaguas que pasan a cada momento y que recorren toda la ciudad, aparte para disminuir la contaminación. Es super práctico, gratis y te ahorras el caminar en las horas más duras del día ( a ver si cogemos ejemplo en Europa ).

El principal motivo turístico que tiene son sus torres Petronas, que actualmente son las torres gemelas más altas del mundo. A su alrededor se concentra toda la emoción de la ciudad con grandes centros comerciales y calles muy pintorescas que cobran toda su vida de noche, donde se puede pasear tranquilamente sin el agobiante calor y se llenan de puestos de comida, todos super ricos y a unos precios ridículos.

Como toda gran ciudad del sudeste asiático, esta también tiene su "China Town" donde puedes comprar de todo lo que te imagines super barato, siempre previo regateo. Es para llegar aquí sin mochila y comprarlo todo y seguir la marcha.

Ya llevábamos un tiempo sin tener ese contacto con la mar que tanto nos gusta y necesitamos, y llegamos ansiosos a Lombok. Nada más llegar y desde los primeros días nos consiguió enamorar. Lombok es AUTÉNTICA, fantástica, cautivadora, muy exuberante y nada explotada (recalco lo de auténtica), todavía. Cada día que termina aquí rezo para que continúe así de auténtica y que no termine siendo como su hermana Bali. Íbamos a dividir el viaje por Indonesia entre Lombok y Bali, pero todos nos quitan las ganas, cada vez que hablamos con alguien que ha estado allí, nos comenta que nada que ver con esto, que la isla ha llegado a un punto sin retorno y que va a petar en breve, que no nos perdemos mucho. De igual modo vamos a ir, para conocer esa realidad, pero creemos que con una semana será más que suficiente.

De momento en Lombok estamos de lujo, súper tranquilos, con nuestra moto alquilada por 40.000 al día (2'30 €) moviéndonos hacia cualquier rincón remoto pero no menos increíble, con sus campos de arroz, playas de arena blanca que forman medias lunas, aguas turquesas, el volcán Rinjani escondido entre la densa bruma que allí se acumula, y todo esto sin apenas tráfico, con la única precaución de conducir por la izquierda (al revés que de costumbre) y que no se metan los búfalos, vacas, cabras, gallinas o lo que sea en la carretera mientras conduces. Las entradas a las playas también están llenas de baches, tierra, barro... pero esta es la pura esencia de Lombok. Es un lujo poder vivir esto tan virgen a estas alturas... y es que dicen que hoy día, Lombok es como Bali hace unos veinte años.

Si a todo esto le sumamos que tiene unas olas increíbles, que no hay mucha gente surfeando (debido también a que la temporada alta va de Mayo a Noviembre) y que tienes la suerte de pillar los primeros grandes swells de años, se convierte en un país que nos ha tocado de lleno.

Respecto al surfing pues no me esperaba que tuviera tantas y tan buenas olas, más sabiendo que no voy en temporada, pero resulta que la costa sur de Lombok funciona diferente al resto de Indonesia, siendo ahora cuando tiran la mayoría de olas sin viento.

He podido surfear tres olas diferentes:
Seger que es una derecha bastante potente, aquí es donde más fuerza entra, por lo que cuando baja la fuerza siempre voy allí.
Air Guling  que es una bahía preciosa donde entra una derecha y una izquierda magnífica bajo un afilado reef pero con suficiente profundidad para que no sea tan peligrosa. Esta es mi favorita, desde que entra un poco de fuerza no me la pierdo, y es que la izquierda me tiene enganchadísimo. Es perfecta, con secciones de tubo y maniobras y siempre suele entrar en el mismo sitio y forma.
La otra que surfeé se llama Mawun, y esta si que precisa bastante fuerza. Un día que empezó a desfasar casi todo, fue para allá y es una bahía súper resguardada que tira unas derechas excelentes, sólo con cuatro personas en el agua.

Normalmente voy a surfear a primerísima hora, antes del desayuno, y casi siempre estoy sólo o con dos o tres en el agua. A última hora a veces me pego otro baño, pero ahí si que toca compartir el pico con más gente aunque se nota que aún su surfing está poquísimo explotado.

En esta gran isla llegó mi nueva década, pasando la barrera de los veinte y disfrutando más que nunca con la personita que más quiero.

Les dejo con unas fotos y vídeos de Kuala Lumpur y estos días de Lombok que nos ha cautivado por completo.

Un saludo viajeros.

Vídeos