Loa - Iquique

Nos fuimos de Pozo Verde hasta la ruta para hacer dedo hacia el norte, en pleno desierto y sin nada alrededor. Esta vez se nos complicó más de lo que pensábamos ya que creíamos que al estar en medio de la nada te podrían parar haciendo dedo, pero no fue fácil. Demoramos tres horas a pleno calor desértico para que parara un camión y nos alcanzara hasta el próximo pueblo. Nos cuenta que en el norte de Chile es muy difícil que te paren por los numerosos problemas que han tenido al recoger a gente.

Desde ese pueblo agarramos una guagua que pasaba y nos dejó en el beachbreak de Loa, justo en el puesto aduanero para la entrada a Iquique. Llegamos casi de noche, pusimos la carpa en la playa y a dormir al borde de ella y del río Loa que desemboca en dicha playa.

Al levantarnos nos dimos cuenta al toque que había demasiada fuerza para la playa y seguía subiendo la fuerza por lo que nos fuimos hasta Iquique. Llegamos a la gran ciudad iquiqueña y nos damos cuenta que está prohibido acampar en todo su litoral, por lo que nos fuimos al hostal Backpacker surfero, donde conocimos a gente con muchísima onda de Nueva York, Brasil, Alemania, Finlandia, chilenos... Se notó lo rico de dormir en un colchón tras tanto tiempo en carpa y tener agua dulce y caliente para ducharse parecía algo divino.

Iquique es la meca del bodyboard chileno y con mucha razón. Sus olas son puro tubo, cortas pero super intensas, de esas que te hacen recordar lo que es quedarte pegado al reef sin aire. Tienen mucha potencia y al estar en plena ciudad hay mucha gente surfeandolas, el 90% bodyboards. Pudimos agarrar varias olazas en Colegio, una derecha que cuando estás dentro te das cuenta de su potencial.

Se nota que es una ciudad super deportiva. En su avenida te encuentras con personas de todas las edades haciendo deporte, a cualquier hora. El skate es de los más destacados. Nosotros aprovechamos para trotar y así conocer todo el litoral iquiqueño.

También pudimos salir de marcha, que hacía mucho tiempo que no cuadraba estar en una ciudad en fin de semana, y el Papo llevabas más tiempo que yo sin vivir la noche, así que imagínense el resultado final...

De aquí nos alejamos de la costa hacia el corazón sudamericano, Bolivia, que nos apetece conocer como viven en el interior a más de 3.000 metros de altura.

Les dejo con algunas fotos y vídeos de Iquique. Nos vamos a Bolivia, como siempre, con las tablas incluidas.

Un saludo viajeros.

Fotos